sábado, 7 de marzo de 2009

Sin noticias de Gurb

Por desidia o por ocupar mi tiempo en otros menesteres, este blog permanecerá inactivo; no sé si con el tiempo dejará de exisitir para dejar sitio en la red. Gracias a los que lo leyeron alguna vez, a los despistados y a los silenciosos.
Futuras incursiones en la escritura deslavazada me esperan a su amparo.
Merci beaocoup.

domingo, 7 de diciembre de 2008

Domingo de resaca

"El bebedor no es aquel que dice mañana me paro, sino hoy mismo me paro, para poder continuar mañana."
Gilles Deleuze

lunes, 9 de junio de 2008

Las trabas de la experiencia

Recuerdo que antes no le tenía ningún miedo a la escritura, me parecía una chorrada muy grande lo del temor a la hoja en blanco. Sentía eso que llaman necesidad de expresarme. Y me daba igual mentir sobre cualquier tema. Ahora soy un cagado, en comparación. Quizá la dejadez o que la experiencia va paralizando.
Recuerdo que con 15 años, por ejemplo, escribí una novela corta en hojas cuadriculadas arrancadas de una libreta del instituto, creo que de matemáticas, llena de sexo y drogas. Sexo que incluía tríos, incestos, sado, homosexualidad y experimentos con gaseosa. Drogas sobre todo salía la coca, por todas partes, a todas horas. Ni había probado jamás la coca ni tenía intención y de sexo también era un párvulo con apenas cuatro salivaciones, toqueteos y experiencias onanistas en mi haber. Pero creo que no salió tan mal, que la jerga estaba bien buscada, que todo parecía verídico aunque un tanto exagerado. Ahora, con algo más de experiencia, me río y pienso que me cortaría totalmente al escribir un relato de esas características. A la larga me saldría, y seguramente más informado, pero sin ese desparpajo y esas ganas de contar mentiras arriesgadas.

miércoles, 4 de junio de 2008

Quiero ser un Criticón

Hace tiempo, creo que desde finales del año pasado, que no escribía en este blog. Me acabé cansando, quizá porque lo único que hacía era ejercicios de estilo (con mayor o menor implicación emocional) y sobre todo porque no había comentarios y pensaba que nadie me leía. Y escribir en balde es algo que ya suelo hacer demasiado.
Ahora con la experiencia de haber sido cronista en La Vanguardia digital para el Primavera Sound y viendo la cantidad de blogs que hay más o menos bien escritos, más o menos polémicos, más o menos comentados, más o menos currados, me han entrado ganas de pasarme de nuevo por el mío.
Y lo que me ha empujado definitivamente a hacerlo son las críticas negativas a mis crónicas. También hubo buenas, pero las malas me insuflan oxígeno. Si de algo me he percatado es que internet, que brinda la posibilidad de exponer infinidad de puntos de vista, también brinda la posibilidad de contradecirlos. Y eso está muy bien. Aunque normalmente los comentarios a las entradas de los blogs, cuando son negativos, más bien son insultos, críticas infundadas, mal redactas, incluso de mal gusto. No sólo me ha podido pasar a mí (que tengo poca experiencia en esto), lo he podido observar en la mayoría de blogs.
Creo que si no tienes ningún comentario faltándote al respeto es que sólo te leen tus amigos, que no tiene mucho éxito. Es un barómetro muy triste, lo reconozco. También podría tratarse de que sólo te leyeran tus enemigos.
Lo más fácil es criticar. Lo difícil, creo yo, es enfrentarse a un texto ajeno y elogiarlo. No todos los textos nos tienen por qué parecer buenos, al contrario, la mayoría de lo que se escribe en internet no es demasiado bueno, ¿pero es digno de ser vilipendiado?
La ventaja de estos sitios es que los lectores también pueden tener su voz, todos nos podemos crecer con un insulto a tiempo. Así nos delatamos antes de ir a la cama. Qué buenos somos cuando dormimos.

jueves, 15 de noviembre de 2007

Encima te ríes

Igual me pongo a recordar y se me quita la sonrisa de golpe. Aunque siempre he exhibido una alegría exagerada, desafortunada, melancólica. Una alegría que hurga en el presente con restos de una alegría pretérita, pero sin retenerla, haciéndose carne, haciéndose dientes. Una alegría que está por estallar, que puede y debe dar miedo. Una alegría de felicidad fallida, de búsqueda infructuosa. Al fin y al cabo, una alegría. Cuento con un ejército de sonrisas que me absuelven de ser soldado.

domingo, 11 de noviembre de 2007

Muy Interesante

Hay un moscardón en mi habitación. Ella dejó la ropa tendida. Luego se fue a buscar caracoles al matadero, con su cestita de mimbre rosa, la que le regalé cuando cumplimos 100 años. Ella me lo agradeció comprándome en el kiosko de la esquina un paquete de chicles y el Muy Interesante, fanzine o panfleto de lectura amena. ¿Sabes que Muñeco Bandido relata en el número de Noviembre su abducción extraterrestre? Y yo sin estos pelos.

lunes, 29 de octubre de 2007